estudiante universitaria con un balón de fútbol en la mano

Lucía Gross, al mando de nuestro equipo de fútbol femenino

Hace dos años, Lucía Gross Fernández cambió el sol de Málaga, su tierra natal, por las nubes y la lluvia de Pamplona para venir a estudiar Medicina en la Universidad de Navarra, “un sueño” hecho realidad. “El clima me echaba para atrás, pero el ambiente me encantó. Supe que si me cogían iba a venir aquí, y es una de las mejores decisiones que he podido tomar. Estoy feliz con todo”.

Lucía visitó nuestra ciudad hace 7 años, cuando acompañaba a uno de sus cuatro hermanos mayores a conocer el campus universitario. Hoy, la colegiala reparte sus horas entre el estudio, sus amigos, el ocio y, muy importante, el deporte. Ha sido la encargada de promover el equipo de fútbol femenino y de voleibol femenino de nuestro Colegio Mayor, como capitana de ambos.

 

estudiantes del equipo de fútbol femenino del colegio mayor

 

Un equipo de fútbol con potencial

Además de Lucía, el equipo de fútbol está formado por Paula Jiménez, Sara López, Diana Mur, Ana Nahnias, Alba Infante, Elena Olazar, Zeni Thompson, Paula Pastor y Aitana Rodríguez. El entrenador es Santiago García Falaguera.

En vez de competir en el Trofeo Rectora, las estudiantes juegan en el Intercollege, una liga de fútbol femenino en la que participan colegios mayores y residencias universitarias. “Es más flexible en cuanto a horarios y tiempos”, explica la estudiante. “Nosotras entrenamos los lunes por la noche, en el Polideportivo Larraona, y jugamos un partido a la semana, que suele ser a las 20h, para que nos dé tiempo a llegar a la cena”.

Nuestras chicas empezaron con fuerza en la liga, con una victoria por cuatro goles a cero, aunque han tenido de todo. “Algunos partidos los hemos ganado, otros hemos perdido o empatado… Estamos aprendiendo de cada uno. La mayoría somos medio-novatas, pero tenemos potencial y nos lo pasamos muy bien”.

“Lo mejor es que hay buen rollo”, insiste la capitana. “No tenemos demasiada afición, pero nosotras somos nuestra afición. Nos animamos unas a otras. Somos un equipo, una piña, ganemos o perdamos”. Cuenta, por ejemplo, que hubo un partido que disfrutaron en particular, porque empezaron perdiendo 5-1 y consiguieron remontar a 5-5. Empataron, pero se sintieron muy orgullosas. “Ahora tenemos que aprender a compenetrarnos, porque podemos ser buenas individualmente, pero a veces juntas somos un poco caos. Pero esto no es la Champions ni nada, es para pasar el rato”.

 

Tiempo para todo

Como capitana, Lucía tiene claro su papel: “Ni soy mejor, ni tengo más experiencia que las demás, ni me creo superior. Todas somos nuevas en el Colegio Mayor y estamos todas para animarnos”. Se encarga de que los entrenamientos y los partidos salgan adelante, y de motivar al equipo.

Además de deportista, Lucía es muy organizada, y saca tiempo para participar en otros ámbitos de la vida colegial: dirige también el equipo de voleibol femenino, forma parte del consejo colegial y se ha encargado de las sudaderas de la promoción de este año.

“Si te organizas te da perfectamente para tener un equilibrio entre estudiar, hacer deporte, salir, descansar… La clave es organizarse y cumplir tus horarios”, asegura.

Por ejemplo, este curso en el que tiene clases por la tarde, las mañanas las pasa estudiando en las salas de nuestro Colegio Mayor, y a media mañana acude a nuestro gimnasio para entrenar, con actividades como las clases de Tonificación. La semana que viene comenzará los entrenamientos de voleibol.

Me gustan todos los deportes, prácticamente. Sobre todo, debido a mis estudios, hago deporte por mi cuenta, con ejercicios efectivos y cortos, como Cross Fit o salir a correr”.

El fútbol siempre le ha gustado a nuestra estudiante –apunta que es madridista, y que solía jugar con sus hermanos– pero no fue hasta el año pasado cuando empezó a entrenar en un equipo femenino de otro colegio mayor, aunque fue también de manera informal. “Yo le pongo ganas y lo que salga. Elena, de nuestro equipo, sí que ha jugado en un equipo de fútbol antes, y hay alguna otra que se nota que sabe más, pero la mayoría de nosotras no tenemos mucha experiencia. Como es en equipo, nos lo pasamos muy bien y lo celebramos”.

En equipo o de manera individual, Lucía tiene claro los beneficios que le aporta hacer ejercicio: “Pongo el deporte como prioridad porque es bueno para el cuerpo y para la mente, sobre todo cuando estás estudiando”.

 

universitarios hacen deporte en Pamplona

 

Vocación de ayuda

Lucía afirma que la carrera le está yendo muy bien, con buenas calificaciones que espera mantener. “Aunque sea duro por el estudio, merece mucho la pena. Me encanta estudiar Medicina”.

Cuenta que al principio tenía dudas, porque tomó la decisión en 2º de Bachillerato, pero enseguida confirmó que había hecho una buena elección. “Me gusta ayudar, aunque suene a tópico. Pensé que, si tenía la capacidad de estudiar algo en lo que pudiese ayudar, tenía que intentarlo. Sentí que tenía que aprovechar esos dones que me había dado Dios. Y Medicina me parece lo más”.

Aún le quedan años de estudio y especialización por delante, en los que irá concretando su vocación como médica. “No tengo ni idea de la especialidad que quiero hacer, lo iré descubriendo a lo largo de la carrera. De momento, estoy realizando el diploma quirúrgico, pero estoy abierta a todo. También me llama la atención la pediatría”.

 

Buena compañía

La Facultad de Medicina está a cinco minutos de nuestro Colegio Mayor, lo que le permite ir y venir cómodamente y aprovechar el tiempo de estudio. “Elegí estar en este Colegio Mayor porque es cercano, está justo al lado del hexágono y de la vida social, en frente del Cañas de Pío XII. También quería tener cierta independencia, sin unos horarios demasiado estrictos que me limitasen mucho. Y ya tenía amigos que estaban aquí”.

Dice que ha hecho muy buenas amistades en el Colegio Mayor y fuera, que es un gran aliciente para apuntarse a un deporte en equipo y para escoger un colegio mayor. “Del Colegio Mayor me encanta que, aunque estés todo el día estudiando o yendo a clase, que es lo que nos toca, pasas todo el día como si hubieras quedado con tus amigos. Te lo pasas bien, disfrutas sí o sí de la vida del estudiante”, concluye.

Esta vida universitaria tan rica incluye socialización, estudio, ocio, descanso… y también deporte, como demuestra Lucía. Le deseamos que siga teniendo éxito en el plano académico y profesional, y también, por qué no, en el deportivo. Ojalá veamos este curso a nuestros equipos de fútbol y voleibol femeninos en la final. ¡Vamos, Larraona!

 

estudiante con un balón de fútbol en el pie

la educadora Ángeles Cabido

“Educar la mirada, descubrir el corazón” – Primera sesión del curso “Amarme, amarte”

Los días 4 y 18 de octubre, nuestros colegiales de primer año tuvieron la primera sesión del taller “Amarme, amarte”, un curso obligatorio dentro de nuestro programa de formación afectivo-sexual. Lo imparte la docente y coach familiar Ángeles Cabido, experta en educación afectivo-sexual y en acompañamiento educativo.

 

estudiante sostiene un espejo en la mano

 

Un cambio de mirada

Para amar bien a otro, antes hay que aprender a amarse a uno mismo reconociendo qué es y qué no es el amor. “Amarte es descubrirte como un bien, querer y buscar tu bien, querer ser un bien ”. Uno de los objetivos del taller es que los colegiales descubran su amabilidad, su valor infinito y su belleza personal.

“No vemos el mundo como es, vemos el mundo como somos. Tú, ¿cómo te ves?”, comenzaba preguntando la educadora. Invitó a mostrarse “sin-cera”, ya que a veces nos cuesta mostrarnos como somos: en redes sociales, con la gente con la que convivimos… Para ello, planteó una pequeña dinámica con espejos sobre la mirada y la persona. “Mírate. ¿Te gustas?”, preguntaba. “La autoestima es aprender a mirarte con los ojos de tu abuela”. Recordó que nuestros abuelos, nuestros padres, las personas que nos aman, nos hacen presente nuestro valor. Para los cristianos, además, es importante aprender a mirarse con los ojos de ternura y de amor Dios.  “La belleza está en los ojos de quien sabe apreciarla, de quien mira con amor. Quien te quiere te mira bien”, afirmaba. A los que están saliendo con alguien, les planteó cómo creen que su pareja se siente valorada en sus ojos y les propuso “entrenar la mirada” para que fuera “de 10”.

Este camino de autoconocimiento, para llegar a amarnos y comprendernos mejor, pasa por reconocer que todos tenemos defectos y heridas. “Lo que llevamos en el corazón es lo que vamos a dar a la pareja actual y en el futuro. Estamos condicionados por nuestros factores fisiológicos–somos seres sexuados–, por la experiencia directa –cómo nos han tratado, la mirada que tenemos sobre nosotros mismos– y por el entorno, las modas que nos rodean. Condicionados, pero no determinados”, explicaba Ángeles. Animó a tomar conciencia de si existen heridas que necesitan sanarse y, en ese caso, pedir ayuda a los educadores o profesionales que corresponda.

 

Ángeles Cabido imparte una charla en el Colegio Mayor

 

El peligro de la pornografía

Mediante vídeos y testimonios concretos, Ángeles mostró que lo que entra por los ojos impacta nuestro cerebro y nuestro corazón. “Cuida lo que miras, deseas y proyectas. Lo que ves con los ojos llega al corazón. Si tienes deseos auténticos de ser amado y mirado de 10, de que en tus ojos tu pareja se sienta mirada y amada de 10, entonces hay que cuidar lo que miramos”, advirtió. Detalló las consecuencias que tiene la pornografía en la vida de quien la consume y en la de los demás: “Te cambia la configuración cerebral y la forma de ver las relaciones sexuales. Como tu cerebro se acostumbra a esos impactos, cada vez necesitas más frecuencia y que sea más explícito. Y te convierte en cómplice de la trata sexual. A mayor consumo, mayor producción y explotación”. Animó a informarse sobre esta cuestión y a pedir ayuda si es necesario, con recomendaciones como el proyecto www.daleunavuelta.org.

“Pensar en otras personas como objetos de placer es olvidarse de que la persona es un fin en sí misma, una unidad corpóreo-espiritual. Tú no tienes cuerpo, eres cuerpo. Y los demás tampoco tienen cuerpo, son cuerpo. Lo que tenemos podemos dejar de tenerlo, pero si dejamos de tener cuerpo, dejamos de ser. Si me acerco al cuerpo, me acerco al alma porque la persona es una unidad”. Recalcó que lo contrario del amor es el uso. “A nadie le gusta que le usen. La persona no es para ser usada, no es un medio, sino un fin en sí misma. Cuando a una persona se le usa para conseguir un fin, se le rebaja a la categoría de objeto y esto siempre acaba rompiendo el corazón”.

 

subdirectora del colegio mayor y profesora experta en formación afectivo-sexual

 

Aprender a gestionar las emociones

La siguiente sesión tratará sobre la gestión emocional y las relaciones afectivas, para que los jóvenes puedan interpretar sus afectos y crecer en autoestima, manteniendo relaciones sanas y respetuosas. “Tenemos que distinguir la emoción –breve, intensa– del sentimiento, que es la emoción pensada, no tan intensa, pero duradera. Tú no eliges qué sientes, pero sí qué haces con eso”, aclaró la docente. En ese sentido, el objetivo es que los estudiantes aprendan a distinguir entre atracción, enamoramiento y amor, y que comprendan cuál es el significado y el valor de los gestos afectivos.

La última parte tendrá que ver con la sexualidad. Los colegiales seguirán profundizando, a través de historias reales, en las dimensiones de la persona, la sexualidad y las relaciones sexuales y valorarán qué es el verdadero sexo seguro y cuáles son las claves para amar. Todo esto les permitirá vivir una sexualidad plena y ahondar en sus anhelos más profundos y en el tesoro de su vocación al amor. “¿Sabéis por qué os gustan tanto los likes en vuestras fotos de Instagram?Porque nuestro corazón está hecho para ser elegido y preferido, pero no cualquier forma de amar satisface el corazón. Sobre ello profundizaremos en las siguientes sesiones”.

un estudiante se mira en un espejo

 

 

 

 

 

grupo de estudiantes en taller de psicología

Aprendiendo a vivir bien – Taller de Psicología

El objetivo de los universitarios es aprender, y no solo en el ámbito académico. Su formación se extiende más allá de las clases, con las vivencias que tienen en el Colegio Mayor y en la ciudad, con sus compañeros en el día a día… Porque como explica Fernando Ventura Basterrica, profesor de filosofía y psicología, no es lo mismo el saber, que se puede adquirir en la universidad, que la sabiduría. Y con frecuencia las personas no sabemos vivir bien. Por ello, el profesor está impartiendo un taller para nuestros colegiales titulado “Psicología para la buena vida”.

 

profesor de psicología

 

Aprendices de sabio

Los miércoles alternos a las 19:30h, un grupo de chicas y chicos se reúne en torno a Fernando para convertirse en ‘aprendices de sabio’ –el taller está basado en el libro de Bernabé Tierno titulado así. Fernando pretende que el curso sea práctico y sencillo, que ayude a los colegiales en su vida. Y eso empieza por reconocer, como Sócrates, que no sabemos nada. “En el libro se hace un diagnóstico: el ser humano no sabe vivir. Y el secreto está en la humildad de ser aprendices”, expone. “No es que tengamos que ser ignorantes, sino que cuando uno se da cuenta de que no sabe nada, es cuando se activa el deseo y la posibilidad del conocimiento, de lograr sabiduría”.

 

libros de psicología

 

Pasar a la acción

En las sesiones los colegiales averiguarán, en primer lugar, cuáles son “los vacíos, las necesidades ocultas e insatisfechas que nos impulsan a adoptar posturas compensatorias”, como explica Fernando. “En la vida, el deseo de ser el primero y de buscar el éxito, por ejemplo, es normal, es bueno. Pero tiene una parte que se puede volver contra nosotros”. Presenta una lista de doce “vacíos” que impiden el tránsito a la sabiduría. Se trata de una serie de “necesidades trampa” que nuestra mente se crea y que nos confunde en el camino al saber auténtico. Por ejemplo: que todo esté y sea perfecto, tener y atesorar cosas, criticarlo todo…

A continuación, el profesor propone pasar a la acción según siete principios universales, unos “cimientos sólidos” sobre los que construir el aprendizaje, como el principio de la armonía o el principio de la intención consciente.

Finalmente, el objetivo último es llevar esta sabiduría a la vida cotidiana. Para ello, los participantes dialogarán sobre situaciones cotidianas apoyados en cien reflexiones sobre conceptos como la serenidad interior, la sociabilidad o la perfección, entre otros.

Este camino lo recorrerán ayudados por libros como “El hombre en busca de sentido”, de Viktor Frankl o “El caballero de la armadura oxidada”, de Robert Fisher.

 

estudiantes sonriendo

 

Un paso más

Fernando, que ha dedicado su vida profesional a la docencia de filosofía, ética y psicología en enseñanzas medias, anteriormente fue fraile y hoy en día pertenece a la Fraternidad de los laicos franciscanos. En el taller, quiere ofrecer a los estudiantes la posibilidad de profundizar un poco más, dando un salto a la espiritualidad. Quiere darles esta posibilidad, sin que sea una imposición, puesto que el encuentro con Dios es algo personal: “Soy cristiano porque Dios me salió al encuentro. Cuando Dios es tu fundamento, cambia toda la estructura de la persona. A mí conocer a Dios, a través de San Francisco de Asís, me cambió la vida”.

Esperamos que los colegiales disfruten y aprovechen esta magnífica oportunidad para cultivar la interioridad y el autoconocimiento, para reflexionar sobre sus vidas y ganar madurez personal, e incluso, espiritual.

“Que la principal ocupación de tu vida, a partir de hoy, consista en vivirla lo mejor posible”. –Michel de Montaigne

 

 

Cancha de baloncesto

Torneo deportivo intercolegial en Madrid

El pasado 30 de septiembre se celebró en Madrid la VII edición del Torneo Deportivo Intercolegial organizado por el Consejo de Colegios Mayores Universitarios.

Cada año, más de mil universitarios y universitarias de distintos lugares de España se juntan para disfrutar de una jornada de deporte.

En esta edición, como novedad, el Colegio Mayor Larraona visitamos Madrid con tres equipos de colegiales: uno masculino de fútbol sala, uno masculino de baloncesto y otro mixto de pádel.

En la edición pasada, más de mil universitarios se juntaron para disfrutar del deporte al inicio de curso. Los colegiales y colegialas jugaron 220 partidos en cinco disciplinas: rugby, pádel, voleibol, fútbol sala y baloncesto.

En el Colegio Mayor Larraona nos decidimos por tres deportes. Fútbol sala, baloncesto y pádel, ya que tenemos pistas en nuestras instalaciones y los colegiales pudieron participar en unos partidos previos de elección y preparación.

Hablamos con Eduardo Díez, estudiante de 5º de Farmacia en la Universidad de Navarra y actual decano y delegado de deportes en el Colegio Mayor. Jugador de baloncesto, se encargó de preparar unos partidos o “pachangas” para que los colegiales interesados se soltaran y conocieran. Todos los residentes tuvieron la oportunidad de apuntarse a este torneo. También se jugaron pequeños partidos de fútbol sala para que los colegiales pudieran socializar. Respecto al pádel, los partidos fueron algo más serios y finalmente se eligió una pareja de chicas y otra de chicos para el torneo.

El equipo de baloncesto lo formaban los colegiales Mario Ramos Capellán, Nicolás Martínez Sanjuan, Iñigo Morales Royo, Martín Díaz Argüelles, Bernardo Palomares Sierra y Eduardo Díez Pérez, el capitán.

 

 

En el equipo de fútbol sala estaban Miguel Martínez Gallardo, Mario Hinojosa Ternero, Álvaro González López, Antonio Deniz Marrero, Marcos Lee Nordlund Sierra, Felipe Pardo de Zela Céspedes, Ignacio Martinavarro Cerda, Hugo Javier Amela López y Alberto Solano Altamiro, el capitán.

 

 

El equipo de pádel estaba formado por una pareja femenina con Cecilia Sierra Álvarez y Sofía Nora Rivero, y una pareja masculina con Jon Gracia Argüello y Santiago Parra Manrique.

 

 

En total, 18 colegiales viajaron el viernes junto a Manuel Sagüés, subdirector del centro, desde el Colegio Mayor hasta Madrid en autobús. El torneo se disputó durante todo el sábado 30 de septiembre, y el domingo regresaron a Pamplona, tras un fin de semana muy intenso y satisfactorio.

 

equipo de estudiantes en el torneo deportivo

 

En baloncesto masculino, nuestro equipo ganó un partido y perdió otros dos. Nuestros colegiales jugaron muy bien ante el equipo del Colegio Mayor Alcalá, colegio mayor claretiano en Madrid, por lo que fue un “derby claretiano“, como cuenta Manuel Sagüés. Nuestros compañeros fueron los ganadores absolutos del torneo en esta categoría.

En fútbol sala masculino, los colegiales también se enfrentaron contra el Colegio Mayor Alcalá, contra quienes perdieron por un solo punto en cuartos de final.

En pádel masculino, tres partidos muy bien jugados –muy igualados– llevaron a nuestra pareja de colegiales hasta octavos de final. Y en pádel femenino, las jugadoras Sofía y Cecilia, las mejores clasificadas, llegaron hasta las semifinales.

En resumen, nuestros colegiales disfrutaron mucho de esta bonita experiencia deportiva e intercolegial, que trataremos de repetir el curso que viene.

 

tres estudiantes en el torneo deportivo para colegiales

Nora Lalou

Nora Lalou, estudiante de 1º de Medicina: “soy francesa, he vivido siempre en Londres y ahora estudio en Pamplona”

En el Colegio Mayor Larraona nos gusta conocer a colegiales con diferentes perfiles e inquietudes.  Esta vez hemos hablado con Nora Lalou (18), una estudiante de primer año de Medicina en la Universidad de Navarra. Nora, quien llegó a Pamplona desde Londres, hace apenas un mes, nos cuenta su experiencia en el Colegio Mayor y sus aspiraciones en el campo de la medicina. 

 

Influencia de diversidad cultural

Nora Lalou es un ejemplo de diversidad. A pesar de haber nacido en Burdeos, Francia, y tener familia en París y Marsella, Nora ha pasado toda su vida en Londres debido al trabajo de sus padres, algo que la convierte en una ciudadana del mundo. Esta mezcla de influencias culturales ha dado forma a su perspectiva sobre la vida y la medicina. 

 Aunque está aprendiendo castellano mientras cursa su carrera en inglés, la multiculturalidad que le caracteriza le ha ayudado a adaptarse a su nuevo entorno en el Colegio Mayor Larraona. La diversidad lingüística no es un obstáculo para Nora, ya que muchos de sus compañeros son bilingües y siempre están dispuestos a ayudarla. 

 “Todos los compañeros me ayudan con el idioma, me hablan en inglés si lo necesito. Además, vivo muy cerca de mi amiga Clara Salorio, que también es de Londres y va a mi clase de Medicina, es un gran apoyo para mí”, señala. 

 

 

Un sueño impulsado por la superación personal

Nora es una joven valiente que ha lidiado con diabetes tipo 1 desde los 13 años. Su experiencia personal con esta condición le ha inspirado a seguir una carrera en Medicina, con el sueño de convertirse en pediatra y brindar apoyo a niños que enfrentan desafíos de salud similares. 

 

Pasión por el deporte

Nora no solo es una prometedora estudiante de medicina, sino también una apasionada deportista. Desde el primer día en el Colegio Mayor, se apuntó al gimnasio del Polideportivo Larraona y ha encontrado un equilibrio entre sus clases y su amor por el deporte. Además, disfruta de jugar al pádel con sus amigos y tiene la intención de unirse al equipo de esgrima de la universidad, ya que practicó este deporte durante dos años en Londres. Su energía y dedicación son contagiosas. 

“Me encanta todo el deporte, he practicado baile, triatlón, natación, esgrima, esquí… un poco de todo. Me gusta practicar deportes nuevos y pasármelo bien. Estoy apuntada al gimnasio de Larraona y me encanta, además, en mis ratos libres quiero empezar a jugar pádel en las pistas del Colegio Mayor y también me quiero apuntar al equipo de esgrima de la Universidad, ya que estuve dos semanas en un campamento deportivo cerca de Madrid y esgrima fue uno de mis favoritos. 

 

 

 

Además, Nora nos cuenta que sus primeros días en Pamplona están siendo muy divertidos e intensos. “Me encanta la cultura española, la gente es abierta y simpática. Quiero aprender bien castellano para comunicarme mejor, y quizá en un futuro, trabajar de pediatra aquí”, comenta. 

 

Un futuro sin fronteras

 Cuando le preguntamos sobre sus planes futuros, Nora nos revela su deseo de aprovechar al máximo su experiencia en el Colegio Mayor y en Pamplona. Aunque actualmente está centrada en sus estudios y en disfrutar de su tiempo en España, aún no ha decidido si su futuro estará aquí, en Francia o en Suiza. Tiene tiempo para reflexionar y aprender antes de tomar una decisión.  

Nora Lalou es una estudiante internacional en el Colegio Mayor Larraona que personifica la diversidad cultural y la pasión por la medicina. Su dedicación, tanto a sus estudios como al deporte, es admirable. Estamos expectantes por seguir su historia entre nosotros de acompañarle en este viaje desde dentro del Colegio Mayor y acogerle en esta etapa llena de oportunidades. 

 

 

 

Aitor Kamiruaga

Aitor Kamiruaga, capellán del centro: “nuestro objetivo es que la experiencia en el Colegio Mayor les sirva para crecer”

Aitor Kamiruaga, el actual capellán de nuestro Colegio Mayor es un hombre de profundos valores cristianos y una inspiradora trayectoria personal. Originario de un pueblo de Vizcaya, ha dedicado su vida a la enseñanza y la música, sus dos pasiones. 

Kamiruaga inició su formación en el Colegio Claret  Askartza y luego continuó sus estudios de Teología en la Universidad de Deusto. Más tarde obtuvo una Licenciatura en Teología Moral en la Universidad de Comillas. Además de su formación teológica, también es un músico talentoso,  título superior de música cursado en el Conservatorio Superior de Música de San Sebastián.  

En 1992, recibió la ordenación sacerdotal como misionero claretiano en la parroquia Corazón de María de San Sebastián. A lo largo de su carrera, Aitor ha desempeñado roles de profesor y director general en tres centros educativos claretianos en Navarra y el País Vasco. Su pasión por la música lo ha llevado a recibir varios premios y a formar parte del Coro de la Asociación Gayarre Amigos de la Ópera-AGAO de Pamplona.  

 Como capellán del Colegio Mayor Larraona, Aitor tiene la misión de transmitir los valores cristianos a todos los estudiantes, siguiendo el lema de la institución: “acompañar personas”. En esta entrevista, nos brinda una visión más profunda de su vida, su compromiso y su enfoque en la educación cristiana. 

 

Trayectoria profesional y educación  

Aitor Kamiruaga comenta que su camino hacia el Colegio Mayor comenzó en 2012 cuando fue designado como director general y representante de la titularidad por el Superior provincial del Colegio Cardenal Larraona. En 2014, asumió también la dirección de otros colegios claretianos en el País Vasco. Desde entonces, su compromiso con la educación cristiana se ha convertido en el motor de su vida diaria.  

A pesar de haber estudiado Teología Moral, Aitor no ejerció directamente en ese campo, pero su formación le ha permitido enseñar religión, filosofía y ética, así como dirigir grupos de oratorio y catequesis.  

 Su pasión por la música es igualmente notable, “estudié canto para interpretar repertorio religioso, colaborando en varios coros y participando en diversas interpretaciones religiosas”, señala. Su formación teológica le ha dado un enfoque especial al interpretar textos religiosos, permitiéndole expresarlos de manera más significativa. 

 

Valores cristianos en la educación 

El papel de los valores cristianos en la educación impartida en el Colegio Mayor Larraona es, según Aitor, como una melodía de fondo que está presente en todo momento. Estos valores son esenciales para el Colegio Mayor y forman parte de la experiencia educativa, aunque a veces puedan pasar desapercibidos. La enseñanza se basa en los valores de Jesús de Nazaret, y se trata de ofrecerlos a los estudiantes sin forzar su decisión.  

 Como representante de la titularidad y capellán, Aitor se esfuerza por vivir y ejemplificar estos valores en su vida diaria: “busco ser una persona coherente en mi fe y acciones, intentando vivir aquello que predico”. 

 

 

Experiencia en misiones y proyectos actuales 

Aitor también ha tenido experiencias significativas en misiones en países subdesarrollados. “Trabajé en la Misión del Norte de Potosí en Sacaca, donde me encargué del hogar campesino y la parroquia. También viajé a India para apoyar proyectos de desarrollo y visité proyectos en Guatemala, Honduras, El Salvador y Ecuador como presidente de Proclade Yanapay. Han sido experiencias muy gratificantes, comenta. 

 En la actualidad, Aitor está involucrado en proyectos con el Coro de la Asociación Gayarre Amigos de la Ópera en Pamplona, lo que le permite combinar su amor por la música con sus valores y creencias personales. 

 

Función La verbena de la PalomaZarzuelas, AGAO.  M Legaristi 

 

Fomentando valores cristianos en el Colegio Mayor Larraona 

En el Colegio Mayor Larraona, se fomentan los valores cristianos a través de iniciativas como el grupo Fe y Vida, donde los estudiantes pueden reflexionar y orar juntos, explorando su fe y crecimiento personal. Además, se ofrecen oportunidades de voluntariado para que los estudiantes se involucren en proyectos de educación social y trabajen con organizaciones como Anfas y el comedor social Paris 365. 

Inspiración y reflexión  

Aitor encuentra inspiración en muchas personas, incluyendo a sus padres, quienes le educaron en la fe y en valores cristianos desde una perspectiva cotidiana. También menciona a formadores de la congregación y personas anónimas que han demostrado fortaleza en medio de las adversidades. 

 

 

Mensaje a la comunidad  

Para la comunidad del Colegio Mayor Larraona y aquellos interesados en conocer más sobre su enfoque educativo y valores, Aitor Kamiruaga enfatiza la apertura y disposición del colegio para acoger a todos. Los claretianos se identifican como “hijos del corazón de María”. “Buscamos ofrecer una comunidad abierta y cordial para ayudar a quienes se acercan”, comenta. 

Consejo para los colegiales 

 Finalmente, Aitor ofrece un consejo valioso a los estudiantes que están buscando su propio camino en la vida: “Dejar de pensarse es dejar de vivirse”. Les alienta a reflexionar sobre su vida, seguir sus propios sueños y no dejarse llevar por las modas o expectativas externas. “Animo a los colegiales a que sean los protagonistas de su propia vida y a encontrar su plenitud personal”, concluye Aitor. 

fiesta principal

Encuentros con veteranos y gala de bienvenida

Ya estamos a mediados de septiembre, el tiempo pasa volando. En el Colegio Mayor hemos seguido esta semana con iniciativas para dar la bienvenida y acoger a todos los colegiales, tanto nuevos como veteranos.

El lunes 11 y martes 12 de septiembre tuvimos reuniones de apoyo académico por carreras, donde los colegiales veteranos compartieron con los recién llegados sus valiosas experiencias y consejos sobre su trayectoria académica. Farmacia, Ciencias, Economía, ISSA, ADE y Derecho y Periodismo fueron algunas de las carreras que nos convocaron.

“Me gustaron mucho los consejos que nos dieron los veteranos de Medicina, al final tener a alguien de referente en el Colegio Mayor es muy reconfortante para los que somos nuevos”, comenta Josefina Recabarren, estudiante de 1º de Medicina procedente de Chile.

Estas reuniones son una oportunidad para aprender sobre la vida universitaria, los profesores, los exámenes y los recursos disponibles en la Universidad. En muchas ocasiones, estas charlas han dado lugar a grupos de apoyo continuo, una mentoría en la que los veteranos guían a los jóvenes.

 

 

Y ayer, jueves 14 de septiembre fue un día muy especial en el Colegio Mayor. Como cada año, celebramos la fiesta de bienvenida para nuevos colegiales. Los estudiantes se vistieron de etiqueta y primero acudimos a una eucaristía. Después, vivimos un momento muy emocionante: el homenaje de veteranos a nuevos colegiales con el famoso pasillo. Allí los veteranos aplauden y acogen la bajada de los nuevos.

 

 

“El homenaje de los veteranos fue una sorpresa, nadie nos lo esperábamos. Fue una gesto muy bonito y emocionante, nos sentimos acogidos e integrados. Al principio estábamos un poco nerviosos, pero en el Colegio Mayor enseguida te das cuenta de que todos somos un grupo unido”, señala Sara Campos, estudiante de 1º Medicina procedente de Alicante.

A las 9 tuvimos una cena muy especial en el comedor, con un aperitivo variado donde los colegiales pudieron pasar un buen rato cenando y conversando. Y después llegó la guinda del pastel, el momento más divertido, el baile con DJ.

 

 

Cada colegial pudo invitar a un amigo a esta fiesta, y fueron dos horas de baile y risas sin parar. Es una bonita manera de soltarse y coger fuerzas para el inicio de curso. Queremos que los colegiales sientan que el Colegio Mayor es su hogar, un espacio seguro.

“Como veterano, llevo varios años asistiendo a esta fiesta y cada año me sorprende. Es muy gratificante ver que los nuevos colegiales se sienten acogidos por los que llevamos más tiempo. Al final en el Colegio Mayor da igual de donde vengas o la carrera que estudies, todos formamos de alguna manera una bonita familia. Además, la fiesta de bienvenida es un encuentro muy divertido, todos lo vamos a recordar con los años”, añade Borja Rodríguez, estudiante de 4º de ADE procedente de San Sebastián.

 

 

Dentro de este conjunto de actos, la mañana del viernes 15 se ha celebrado el Acto de Apertura de curso en la Universidad de Navarra. Por motivo de esta celebración ninguna carrera ha tenido clases en el día de hoy. Todo sirve para que las nuevas promociones entrantes vayan conociendo el entorno en el que van a vivir los próximos años y forjen esas primeras amistades, tan importantes en la vida universitaria. Después de este proceso, llega la vida más cotidiana. Vamos a ello.

Colegiales en el Portal de Francia

El Camino para conocer Pamplona

El pasado fin de semana se celebró en Pamplona el aniversario de los 600 años del Privilegio de la Unión, un tratado que unió a los burgos de la ciudad el 8 de septiembre de 1423. La capital navarra estuvo llena de iniciativas históricas sobre arte, cultura y patrimonio. En el Colegio Mayor Larraona aprovechamos esta ocasión y el sábado 9 de septiembre realizamos una parte de etapa del Camino de Santiago desde Arre a Pamplona. Después, acudimos a distintos talleres históricos, donde los nuevos colegiales conocieron la historia de su ciudad de residencia.

Empezamos el día madrugando para coger un autobús que nos acercó desde el Colegio Mayor hasta la Trinidad de Arre, un concejo del pueblo de Arre compuesto por un puente, basílica y caserío en el Valle de Ezcabarte. El buen tiempo nos acompañó durante toda la jornada, en la que caminamos 4 kilómetros desde Arre hasta el Portal de Francia de Pamplona.

“Me animé a realizar estar actividad porque soy de Salamanca y me encanta hacer rutas por la montaña. Además, me llamaba la atención el taller histórico de Pamplona. Me ha servido tanto para conocer historia de Pamplona como para conocer gente del Colegio Mayor con la que no había tenido trato”, comenta María Navarro, estudiante de Relaciones Internacionales e Historia en la Universidad de Navarra.

 

 

Partimos desde el puente medieval de Arre, pasando después por la Calle Mayor de Villava y de Burlada. Más adelante llegamos al puente de la Magdalena, entrada a la ciudad de Pamplona del Camino de Santiago que pasa por encima del río Arga.

 

 

Por último, entramos a Pamplona por el Portal de Francia, construido en 1553 por el virrey duque de Albuquerque. Actualmente es el mejor portal conservado de los seis que tenía el antiguo recinto amurallado de la ciudad.

“La semana pasada tuvimos visita por el Casco Antiguo de Pamplona con una guía buenísima. Así que al pasar otra vez por el Portal de Francia ya sabía dónde estaba y la historia del lugar. Lo que más me llamó la atención de la etapa fue una pequeña iglesia en el pueblo de Arre, me pareció muy bonita”, añadía María Navarro.

 

 

La etapa que realizamos fue una caminata testimonial, para conocernos y descubrir el entorno. Los colegiales pudieron disfrutar de una agradable mañana paseando por Pamplona, observando lugares emblemáticos y haciendo algo de ejercicio. Al terminar la caminata, los colegiales repusieron fuerzas tomando algo en un bar del centro de Pamplona.

 

 

Llegado el mediodía, cada uno eligió una actividad histórica para conocer mejor la parte vieja de la ciudad. Pamplona ofrecía diferentes talleres culturales como uno sobre recreación histórica de armas, armaduras y tecnología militar en el siglo XV u otro sobre la Guerra de los Cien Años. Nuestros colegiales se decidieron por visitar el Mercado Medieval compuesto por más de 120 puestos de productos de alimentación y distintas variedades artesanales. El Mercado se complementaba con música, recorridos teatralizados, juegos infantiles, exposiciones y demostraciones de oficios de antaño.

“Después de almorzar en un bar, recorrimos el Mercado Medieval. Ojeamos las casetas y nos cruzamos con un desfile musical de vikingos, y después de ver todos los puestos, regresamos al Colegio Mayor para comer. Disfruté mucho del ambiente que había en la ciudad”, comenta Victor Gil, estudiante de Biología y Ciencias Ambientales en la Universidad de Navarra.

 

 

“Lo que más me gustó de la actividad fue descubrir lugares cercanos a Pamplona en los que no había estado. Me gusta mucho la naturaleza, y me he apuntado un sitio en Arre para pasar el día y hacer un picnic más adelante”, nos comenta María.

 

 

Compartir momentos de ocio y cultura es esencial para cultivar amistades en el Colegio Mayor. Por eso animamos a realizar las actividades propuestas para disfrutar, aprender y divertirse en grupo.

“Al final los colegiales de primer curso somos los nuevos, nos da vergüenza hablar con gente que no conocemos y realizar esta actividad me ha ayudado a soltarme y pasar un buen rato. Al tratarse de una ruta a pie, tuvimos tiempo para hablar con todos los colegiales y conocer un poco más de ellos y de Pamplona. Tengo ganas de apuntarme a la siguiente actividad”, concluía María.

 

 

“El rincón que más me llamó la atención de la ciudad fue la Calle Redín de Pamplona por el fuerte contraste que se apreciaba entre sus construcciones del siglo XVI, y las demás, modernas a su alrededor. De aquí también me chocó el pasaje de madera sobre la calle que conecta las dos viviendas”, sentenciaba Victor.

Después de visitar el Mercado Medieval, los colegiales volvieron al Colegio Mayor para comer y compartir su experiencia con el resto de sus compañeros.

 

Apuntes sobre el Privilegio de la Unión de Pamplona:

-El Privilegio de la Unión de Pamplona es un acuerdo histórico que se estableció el 8 de septiembre de 1423 por el rey Carlos III el Noble, con el propósito de unir los tres burgos principales que constituían la ciudad de Pamplona en la Edad Media.

-Este año 2023 se han cumplido 600 años de dicho tratado.

-Anualmente, el 8 de septiembre y durante la semana previa, Pamplona conmemora el Privilegio de la Unión mediante una amplia programación que incluye diversos espectáculos musicales y artísticos, la celebración del mercado medieval tradicional y la organización de visitas guiadas a la Casa Consistorial.

-El 8 de septiembre, fecha en la que se firmó el acuerdo, la Comparsa de Gigantes y Cabezudos de Pamplona acompaña la procesión de la Corporación Municipal, que representa a la ciudad en su totalidad, mientras recorre las calles de los tres antiguos burgos. Posteriormente, se celebra un acto de homenaje y una ofrenda en la Catedral de Santa María en honor a Carlos III.

Vistas desde el Colegio Mayor

Primera semana de curso- Hablamos con Noa Marcos y Roberto de Jong Barbosa

En el Colegio Mayor Larraona, la llegada de un nuevo año académico ha traído consigo la incorporación de estudiantes con talento y mucha motivación. Entre ellos, hemos hablado con una estudiante de Derecho y Relaciones Internacionales, Noa Marcos y con un estudiante de Farmacia, Roberto de Jong Barbosa. Noa tiene 20 años, viene de Madrid y va a empezar su carrera en la Universidad de Navarra. Roberto tiene 22 años, procede de Madrid y también va a empezar sus estudios la facultad de Ciencias de la UNAV.

Diplomacia y mundo global

Noa eligió estudiar Derecho y Relaciones Internacionales en la Universidad de Navarra tras valorar otras opciones. Consideraba que estudiar un doble grado suponía mucha carga lectiva, pero se propuso sacar el máximo partido a la universidad y decidirse por Relaciones Internacionales y Derecho. A Noa siempre le había interesado Derecho, sus padres han estudiado esa carrera y tiene buenas referencias. En cuanto a Relaciones Internacionales, la diplomacia y el mundo global le interesan mucho, ya que le gustaría trabajar en un negocio internacional. Además, añade que en la Universidad de Navarra siempre te encuentras con gente de todo el mundo y eso es muy enriquecedor.

 

 

Afición por la química y la investigación

Roberto eligió estudiar Farmacia porque de mayor quiere dedicarse a la investigación. Farmacia es una de las vías que le llevan por ese camino, y de ahí su elección. Durante Bachiller, se dio cuenta de que le gustaba mucho la química en Bachiller, y por eso eligió la carrera de Farmacia.

 

 

Universidad de Navarra: formación integral

Lo que animó a Noa a estudiar en Pamplona fue el consejo de su hermano, quien había cursado sus dos últimos años universitarios en esta ciudad. Según Noa, su hermano le contó que la Universidad de Navarra ofrece una formación integral que va más allá de la mera obtención de un título universitario. “Aquí, los estudiantes tienen la oportunidad de crecer no solo académicamente, sino también personalmente, participando en actividades extracurriculares, voluntariados y deportes, y conociendo a personas de diversas partes del mundo”, comentaba Noa. Este ambiente completo y enriquecedor fue un factor determinante en su elección.

Roberto, por su parte, comenzó su carrera en Madrid, pero decidió trasladarse a la Universidad de Navarra por su proyecto educativo y social, especialmente por las prácticas e instalaciones que ofrece esta institución.

 

Colegio Mayor Larraona: libertad responsable

Noa también nos habló sobre su elección de residencia en el Colegio Mayor Larraona. Lo que más le atrajo fue la combinación de un ambiente mixto con un proyecto e ideario cristiano. Esta combinación única le brinda la oportunidad de vivir experiencias enriquecedoras que van más allá de la mera convivencia, como participar en actividades, voluntariados y charlas que promueven un desarrollo integral.

Roberto, por su parte, eligió el Colegio Mayor Larraona por dos razones fundamentales. “En primer lugar, valoro la libertad responsable que ofrece el colegio, ya que considero que encontrar el equilibrio entre estudios y vida social es esencial para prepararse para la vida adulta”, señalaba Roberto. Además, aprecia el fundamento cristiano de Larraona y cree que la fe no debe quedar atrás en la etapa universitaria.

 

Deportes variados y rafting para socializar

Noa destaca que las actividades deportivas de las jornadas del Colegio Mayor fueron muy entretenidas, ha probado entrenamientos que nunca había practicado. Además, le sirvieron para juntarse con colegiales con los que no había coincidido. “Es una forma distinta de relacionarse, aunque sea por unas horas”, añadía la joven. A Roberto le gustó mucho la actividad de rafting el primer fin de semana. Se divirtió mucho y le sirvió para conocer colegiales nuevos.

 

 

Importancia de conocer a todos los colegiales

Los primeros días en el Colegio Mayor han resultado sorprendentemente agradables para Noa. Aunque inicialmente temía la idea de integrarse en un nuevo grupo en una ciudad desconocida, pronto se dio cuenta de que la comunidad del colegio mayor es muy acogedora. Desde el momento en que llegó, experimentó una cálida bienvenida por parte de todos, lo que le hizo sentirse como en casa. En las comidas, al principio se sentaba con las chicas que conoció los primeros días. Ahora, siempre baja con una amiga y se juntan con el grupo que encuentren, tanto de chicos como chicas.

“Considero que es una buena forma de socializar y conocer gente nueva. En un colegio mayor con tanta gente siempre va a haber grupos de amigos, pero es importante abrirse a conocer a todo el mundo ya que al fin y al cabo convivimos todos juntos”, comentaba.

A pesar de extrañar a su familia y amigos, está ansiosa por embarcarse en esta nueva etapa llena de oportunidades.

 

 

Amabilidad y acogida de los compañeros

Roberto, a pesar de haber estudiado cuatro años en otra universidad, también ha tenido una experiencia muy positiva en el Colegio Mayor. Se ha sorprendido gratamente por la amabilidad y acogida de sus compañeros.

“La convivencia en el comedor y en los pasillos ha sido un lugar propicio para entablar amistades, sin importar de qué curso y carrera seas. En las comidas, siempre me junto con los mismos, pero considero importante de vez en cuando bajar solo y sentarme con alguien que no conozco, porque todo el mundo está abierto a socializar y te sacan un tema de conversación, y de ahí pueda que nazca una bonita amistad”, comentaba el joven.

 

Escritura de poemas y pasión por la música 

Noa tiene aficiones muy variadas. Le gusta mucho escribir poemas, explorar su lado más artístico. También le gusta la lectura variada: romántica, policiaca y novelas. Le apasiona la música, considera que escuchar música variada es muy importante para saber cómo funciona el mundo. Además, escuchar música internacional le sirve para aprender idiomas.

La joven se considera una persona muy curiosa y le gusta probar deportes nuevos, y como dice, “hay tiempo para todo”. Le gustaría hacer actividades nuevas en Pamplona, ya que “ciudad nueva, vida nueva”. Le interesa hacer escalada y tiro olímpico. Le gustaría hacer voluntariado durante el curso y le interesan mucho las charlas sobre el medio ambiente.

 

Afición por el deporte y lectura de ciencia ficción

A Roberto le gusta mucho el deporte, y le gustaría utilizar las instalaciones del Colegio Mayor para hacer futbol sala y baloncesto. También le interesa el tenis y el boxeo. Además, le gusta leer libros de ciencia ficción. Le apasiona la música, y escucha todo tipo de géneros. A Roberto le gustaría conocer el grupo Fe y Vida del Colegio Mayor.

 

 

Un comienzo prometedor en las clases

A pesar de los nervios iniciales, Noa está llena de entusiasmo por comenzar sus clases. Reconoce que la universidad implica desafíos, pero está dispuesta a dar lo mejor de sí misma y aprovechar al máximo esta oportunidad de aprendizaje. Las clases no solo son una oportunidad para adquirir conocimientos académicos, sino también para conocer a sus compañeros de estudios y ampliar su horizonte.

 

Expectativas y metas de Roberto y Noa

Tanto Noa como Roberto tienen grandes expectativas para este curso y sus etapas universitarias. El enfoque de Noa no se limita únicamente a los estudios; planea vivir su experiencia universitaria al máximo, participar en diversas actividades extracurriculares, aprender de profesores de todo el mundo, ver las cosas desde diferentes perspectivas, y disfrutar de su autonomía. Su lema para este año es claro: “La universidad no son solo notas; es una oportunidad para crecer y experimentar todo lo que la vida universitaria tiene para ofrecer”.

Noa y Roberto representan el espíritu decidido de los nuevos estudiantes que llegan al Colegio Mayor Larraona, ya que se interesan mucho por las actividades del Colegio Mayor y ambos quieren realizar voluntariado. Además, acudieron a muchas actividades deportivas de las jornadas de bienvenida como rafting, zumba, gap y cross training.

 

 

En el Colegio Mayor Larraona expresamos nuestros mejores deseos para la experiencia universitaria de Noa y Roberto. Consideramos que nuestra misión de brindarles apoyo a lo largo de este camino es esencial para que se sientan integrados. Estamos decididos a acompañarles a medida que enfrenten los desafíos que se presenten, al igual que lo hacemos con todos los demás colegiales y colegialas.

Grupo de zumba de nuevos colegiales del Colegio Mayor Larraona

Nuevo curso 2023-2024: un viaje de conocimiento y convivencia

Los pasillos del Colegio Mayor Larraona han vuelto a cobrar vida con la llegada de los colegiales y colegialas para el inicio del nuevo curso. Entre los días 27 y 30 de agosto recibimos a los estudiantes con los brazos abiertos, y desde entonces, no hemos parado el ritmo.

Estos días han estado llenos de intensas experiencias de bienvenida, convivencia y acogida. En el Colegio Mayor acompañamos a la juventud en todas sus dimensiones, promoviendo el desarrollo personal, social y trascendente. Por esta razón, hemos organizado una serie de actividades y jornadas para que comiencen a conocerse y se sientan cómodos en un entorno seguro.

Desde el 27 al 30 de septiembre vivimos las jornadas de acogida, donde dimos la bienvenida a nuestros colegiales y sus familias. La llegada se organizó por carreras, dando la oportunidad de conocer a compañeros con intereses similares desde el primer día. En esos primeros encuentros estuvimos con las familias en una reunión inicial donde se les informó sobre proyecto educativo, y luego hablando con ellos en los pasillos y a la hora del café, donde los colegiales se despidieron de sus seres queridos.

Nuestros veteranos acompañaron a los nuevos colegiales en un tour por nuestras instalaciones, permitiéndoles familiarizarse con su nuevo hogar. Estos veteranos están colaborando y dando muestra de los valores que se respiran en nuestro Colegio Mayor, ya que es esencial la colaboración grupal entre todos.

 

 

Las reuniones con veteranos de Medicina ayudaron a que los nuevos colegiales resolvieran las dudas e inquietudes sobre su futura carrera. El viernes 1 de septiembre disfrutamos de una tarde de entretenimiento haciendo rafting en la foz de Lumbier. El buen tiempo nos acompañó durante toda la actividad y la diversión protagonizó la jornada.

 

 

El fin de semana siguiente, sábado 2 y domingo 3 de septiembre, seguimos con las dinámicas de convivencia y socialización, teniendo primero una charla sobre el curso proyecto educativo y las normas de convivencia. Es importante que los colegiales respeten y cumplan las normas desde el primer día para garantizar un buen ambiente para todos.

El sábado por la tarde se basó en descargar energía, ya que los colegiales asistieron a clases de zumba, kick boxing, gap, pádel y cross training en el Polideportivo Larraona. En el Colegio Mayor consideramos fundamental compaginar los estudios con el deporte, por eso ofrecemos diferentes alterativas para mantenerse activo físico y mentalmente en el  Polideportivo Larraona.

 

 

Llegado el domingo, seguimos con las dinámicas para conocernos y conocer nuestro entorno. Tuvimos eucaristía, y también nuestra primera visita a Pamplona protagonizada por la lluvia.  Dicen que “al mal tiempo buena cara”, y eso es lo que hicieron los colegiales, que conocieron la historia y el paisaje de la ciudad, especialmente del Casco Antiguo.

 

 

A mediodía tuvimos una barbacoa en el patio del Colegio Claret Larraona. Los nuevos colegiales pudieron conocerse mejor y disfrutaron de un momento muy agradable. Por la tarde, prepararon una serie de dinámicas y actividades para un concierto que tuvo lugar después de la cena. Sin duda, fue un día muy completo y entretenido donde pudimos sentirnos más cerca de los nuevos colegiales.

Estos días han sido muy especiales y han estado cargados de emociones. Los reencuentros y las nuevas amistades, la convivencia y la conversación de estos primeros días son experiencias imprescindibles. Ya estáis listos para vivir vuestra experiencia universitaria. Y en el equipo del Colegio Mayor Larraona también lo estamos.

Esperamos que sea un año lleno de aprendizaje, crecimiento y muchas experiencias inolvidables para todos los colegiales y colegialas del Colegio Mayor Larraona, ¡bienvenido, curso 2023-2024!