patinadora en un salto acrobático sobre hielo

Nerea Grandoso: deportista nacional y estudiante universitaria

Nerea Grandoso es de Vitoria y acaba de terminar su primer año de Biología en la Universidad de Navarra, además definalizar una temporada de competición de patinaje artístico. ¿Quieres conocerla? Hablamos con ella para compartir su experiencia como universitaria y colegiala de Larraona.

 

Arte sobre hielo

Nerea empezó a patinar a los 3 años y desde entonces no lo ha dejado, fue amor a primera vista. Compite en la modalidad individual y a nivel nacional de forma regular: “El nivel es bastante alto, entreno 5 o 6 días a la semana”. Al venir a Pamplona Nerea cambió de club, y ahora entrena en el Palacio de Hielo del club Huarte. “He entrenado en Vitoria toda mi vida y vine a Pamplona porque tenía Biología y pista de hielo, es el mejor sitio para compaginar ambos”.

Mi reto este año ha sido compaginar los estudios con el deporte” afirma. Nerea nos cuenta que lo ha conseguido organizándose súper bien y teniendo muy claras las horas disponibles que tiene. “Llevo varios años entrenado mucho y con muchas horas de estudio, así que más o menos ya estaba acostumbrada, pero estar en Larraona me ha ayudado bastante”. Vivir en el colegio mayor y no preocuparse por cocinar o hacer largos trayectos a la universidad le ha permitido centrarse en estudiar y patinar. “Para mí eso ha sido clave para poder hacer las dos cosas, si no habría sido imposible”.

También le ha servido mucho la asesoría académica ofrecida en el colegio mayor: “Te ayuda a ver las cosas desde otra perspectiva y a organizarte más, y eso para mí es fundamental”.

 

patinadora de patinaje artístico sobre hielo en medio de una actuación

 

Amor por la naturaleza

Nerea está satisfecha con la carrera y así lo expresa: “Este año me ha ido súper bien, estoy encantada con la universidad. He acertado, esta es mi carrera”. Toda su vida ha sido una apasionada de los animales y, aunque de pequeña quería ser veterinaria, al ir creciendo descubrió que le interesaban todos los seres vivos: “La naturaleza en general me encanta”.

Su interés por aprender no se limita a las clases; Nerea ha pasado el mes de junio trabajando como alumna interna del Departamento de Biofísica en el laboratorio de la universidad. Junto a otras personas, colabora con el profesorado, participa en los experimentos y aprovecha la experiencia para aprender y coger práctica fuera del horario de clase. Está ilusionada por el proyecto en el que están trabajando actualmente y lo expresa con una sonrisa: “Estamos trabajando con materia activa y aprendiendo un poco de microbiología y física para aplicarla a nuestro proyecto”.

 

colegiala posando frente a la puerta del colegio mayor claret larraona

 

Un segundo hogar

Aunque su agenda ya está muy completa de por sí, Nerea saca tiempo para hacer vida en el colegio mayor; este año ha participado en el taller de bailes latinos, en algún Think and Beer y otras actividades al inicio del curso. “Me gusta que hay muchas actividades para hacer aquí, si fuese por mí me apuntaba a todas, pero no me da tiempo”, nos confiesa entre risas.

Comenta que lo que más disfruta es el ambiente colaborativo del colegio mayor: “Aquí conoces gente de otras carrerasy eso me gusta mucho, ayer tuve una conversación súper interesante con un chico que está estudiando filosofía”. También destaca la seguridad con la que disfruta de vivir fuera de casa: “Estoy muy tranquila, sé que si tengo cualquier problema en Larraona hay mucha gente a la que puedo pedir ayuda”.

 

colegiales en una sesión de think and beer en el colegio mayor

 

Nerea cierra el curso feliz y satisfecha, con la paz que proporciona el esfuerzo y el trabajo bien hecho: “No podía haber elegido mejor sitio para venir”.

Chica joven sonriendo en un colegio mayor

Paula Jiménez: médico en ciernes y deportista aficionada

Paula Jiménez es logroñesa y estudia primer año de Medicina en la Universidad de Navarra. Pertenece a la primera promoción de colegialas, tras el cambio al modelo mixto en el Colegio Mayor Larraona. Hablamos con ella para conocer su experiencia.

 

Aunque comenta que la carrera es muy exigente, Paula consigue compaginarla con otras actividades: juega al fútbol, al pádel, visita a su familia, sale con sus amigas…“Obviamente te metes a Medicina y sabes que es una carrera en la que tienes que estudiar, pero normalmente hay tiempo para todo”. Nos cuenta que para rendir bien necesita hacer más cosas: “Si está todo demasiado centrado en la uni, como que se me queda el mundo pequeño”.

 

equipo de fútbol femenino del colegio mayor larraona

 

Pasión por el deporte

Es muy deportista: juega como defensa en el equipo de fútbol sala femenino de nuestro colegio mayor. Las chicas entrenan todos los lunes por la noche, así que encuentra un rato para despejarse. Durante el curso han competido en la Liga Intercolegial, teniendo partidos casi todas las semanas, y también jugaron en el Torneo de la Copa de Primavera. El fútbol hace que tenga mucha relación con chicas de otras carreras. También es aficionada del pádel, y ahora que ha terminado la temporada de torneos, lo practica todavía más. “Solemos ir mucho a jugar a pádel aquí en las pistas de Larra, vamos dos veces a la semana o así”.

 

chicas sonriendo frente a unas pistas de pádel

 

La pasión por el deporte la lleva desde pequeñita. En el colegio Paula practicaba gimnasia rítmica y llegó a competir a nivel nacional. Una lesión de cadera le forzó a retirarse: “Pasé de entrenar todos los días a no poder ni andar”. Nos cuenta que ese cambio radical en su vida le abrió la puerta a su vocación: “Me trataron, pero nunca me dijeron qué me pasaba y se me quedó la espinita”. Por eso, desde entonces quiere ser traumatóloga.

 

gimnasta nacional infantil de gimnasia rítmica

 

Vocación y estudio

Aunque tiene bastante claro que el campo al que se quiere dedicar es la traumatología, Paula tiene los pies en la tierra y está abierta a un cambio de rumbo: “Una cosa es estudiar la materia, pero luego es en la práctica cuando tienes que verte. Tercero de carrera, con las rotaciones en el hospital, va a ser el año de decidir”.

El tener desde pequeña unas rutinas tan marcadas ha hecho que organizarse los horarios en la universidad no se le haga difícil.  Al preguntarle sobre su habilidad para compaginar el estudio con el deporte y la vida social nos confiesa que la clave es distribuir tu tiempo y exprimirlo al máximo. “Quiero jugar a pádel, tomar algo, salir con mis amigos y para eso tengo que estudiar este tiempo, así que lo tengo que aprovechar”. También comparte un consejo útil para los años universitarios: “Necesitamos ratitos que no sean de estudiar, porque si no nos volvemos locas”.

 

universitaria estudiando sonriente

 

Vivir en el colegio mayor

La vida en el Colegio Mayor Larraona le facilita esos descansos: “vamos a jugar al pádel, salimos a dar paseos, vamos a tomar un café… También prefiero estudiar en Larraona porque me gustan más las salas”. Nos cuenta que tiene más relación con los y las estudiantes de Medicina, ya que tienen diferentes horarios que el resto de carreras, una organización bimestral, diferentes fechas de exámenes… El tener un grupo de la misma carrera y por lo tanto las mismas rutinas, le facilita el estudio. Aún así, la vida común en el Colegio Mayor y el deporte hace que “haga piña” con el resto de chicas. Defiende que el ambiente es muy bueno y que está contenta sobre todo en relación con el cambio a modelo mixto. “Yo no he vivido otra cosa, pero es como si hubiese sido así toda la vida. Lo hemos hablado con los veteranos y se nota el cambio pero la gente está muy contenta”.

 

grupo de amigas posando en un balcón

 

Inicio del camino

Le preguntamos por qué decidió venir a Pamplona a estudiar. Nos explica que al terminar Bachiller sus opciones eran Madrid o Pamplona, pero Madrid se le hacía innecesariamente grande: “Yo necesito que todo esté aquí, salir de casa y llegar a los sitios”. Además, al estar tan cerca de Logroño hace que pueda ver a su familia y a sus amigas del colegio. “Mis padres a veces vienen a comer los domingos, es muy fácil vernos. Es como estar en casa sin estar en casa”.

Un año después de tomar la decisión de mudarse a Pamplona está convencida de que no podía haber elegido mejor: “No tengo ningún tipo de duda de que ha sido la decisión correcta, creo que no puedo estar mejor”.

misionero claretiano en Bolivia

Víctor Guerendiáin: una vida al servicio de los demás

Víctor o “el padrecito”, como lo llaman aquí, es uno de los misioneros claretianos que residen en el colegio mayor y que contribuyen a hacer presente el espíritu claretiano en Larraona. ¿Quieres saber más? Hablamos con él para compartir su historia.

 

misionero claretiano

 

Víctor Guerendiáin Ciganda (84 años) es natural del Valle de la Ultzama y viene de una familia de 13 hermanos. Tras trabajar en el colegio Corazón de María en Bilbao, volvió a Navarra para la fundación del Colegio Claret Larraona en 1970, del que fue el primer director. Aún a día de hoy sigue en contacto con algunos estudiantes de ese momento, a quienes recuerda con mucho cariño.

 

misioneros claretianos en 50 aniversario

 

Nos cuenta que desde pequeño, a los 13 años, sentía la llamada de la vocación a ser misionero claretiano, como lo fue el hermano de su abuelo. Sus padres y su familia lo animaron en esta decisión. Pasó cuatro años en el Colegio Claret Larraona y en 1974 se fue a las misiones de Bolivia.

Estuvo 35 años viviendo en el norte de Potosí, aunque, al ser el superior de la delegación allí, visitaba todas las comunidades dos veces al año. En su labor de misiones pasó también mucho tiempo en Tarija y en Cochabamba.

Durante sus más de tres décadas de servicio, en las que aprendió quechua, Víctor levantó cinco hogares campesinos, en los que también se construyeron colegios. Actualmente los propios antiguos estudiantes de Víctor son los responsables de la gestión de estos hogares.

Además, se encargaba de recorrer los pueblos para poder oficiar las bodas, bautizos, funerales… Su labor de evangelización fue muy importante. «Los indígenas son muy agradecidos», defiende. Comenta que aún sigue en contacto con varias personas de allá y que mantienen una buena relación de amistad.

En 2009 Víctor sufrió un infarto cerebral y se vio obligado a volver a España para recuperarse. La adaptación a la vida de aquí no le resultó fácil: «Yo soy boliviano», afirma. En este nuevo capítulo de su vida, Víctor sigue manteniendo el mismo espíritu claretiano de solidaridad: colabora en la asociación claretiana de Proclade Yanapay, participa en los Grupos de Jesús de la parroquia de San Francisco de Asís y hace vida en el complejo educativo de Claret Larraona. Incluso se anima a hacer un rato de ejercicio todos los días en el Polideportivo Larraona.

 

personas becadas en el Colegio Mayor Larraona

 

Es un placer y un orgullo disfrutar de la compañía de personas como Víctor, modelo a seguir que nos transmite el espíritu de San Antonio María Claret.

invitados al acto de becas 2024

Acto de Imposición de Becas: una velada para recordar

El sábado 20 de abril celebramos el acto institucional más importante del curso en nuestro Colegio Mayor: la Imposición de Becas y Entrega de Placas de Fin de Grado. Fue una emotiva velada, animada musicalmente por los colegiales Mario Ramos y Javier Albiac.

 

estudiante universitario toca el violín

 

El acto comenzó con el discurso de apertura del Dr. Carlos Naya Villaverde, invitado especial y presidente del Acto Académico.

A este le siguió la presentación de Eduardo Díez Pérez y Alejandro Boned Torres, nuestros colegiales Decanos, que hicieron un repaso de las actividades organizadas en el Colegio Mayor durante este curso. Terminaron el discurso con un consejo del anterior decano: “Hay una palabra que nos dejó Javier Calvo: aprovechad.”

 

estudiante presenta el acto de becas en el colegio mayor

 

Uno de los invitados de honor del evento fue Francisco “Chapu” Apaolaza Fernández, antiguo colegial y eterno miembro de la Tuna Larrona. Apaolaza es periodista, autor de varios libros y ha sido galardonado con el ‘Premio de Defensa’ 2006 por sus coberturas periodísticas, ‘Premio Internacional de Periodismo Manuel Alcántara’ y Premio ‘Unicaja de Artículos’. A día de hoy podemos escucharle en ‘La Brújula’ donde tiene su propia sección, y leerle en Diario de Navarra, La Razón o The Objective. Además, ha cubierto grandes sucesos internacionales como la ayuda humanitaria en Ucrania (en la que participó) o los atentados de París de 2015 o los de Bruselas en 2016.

Chapu recibió una de las Becas de Honor, e impartió una lección magistral a nuestros colegiales, titulada Razones para la alegría. “Me consta que a veces los jóvenes vivís instalados en la tristeza y la desesperación”, comenzó diciendo. Sin embargo, animó a los estudiantes a no tener miedo, a sentir esperanza, consuelo y solidaridad. “Siempre habrá gente mala, pero es muy poca, es la sombra de una luz magnífica que es la humanidad”. Culminó su discurso instándonos a vivir en el amor, a disfrutar de lo que tenemos, a ser generosos, valientes y a sacar el máximo de la vida, que no sabemos cuándo puede terminar: “La vida no será como piensas, pero guarda sorpresas que ni tú ni yo podemos imaginar. Como me dijo mi padre en estas escaleras: te recomiendo que la aproveches”.

 

Invitado especial da un discurso en el salón de actos

 

Tras este inspirador discurso, los colegiales que cumplen su tercer año en Larraona recibieron su beca. Subieron al estrado los colegiales Javier Albiac Palomar, Faustino Buschittari Bellani, Alejandro de Udaeta Comella, Ignacio Díez Rodas, Miguel Ezquerra Alcalde, Mario López Ruiz, Samuel Pascual Garrigos y Diego Sánchez-Moreno Flecha.

 

estudiantes con beca del Colegio Mayor Larraona

 

Seguidamente, se entregaron las Placas de Fin de Grado a los colegiales que terminan su licenciatura este año 2024. Fueron distinguidos los colegiales Eduardo Díez Pérez, Alejandro Boned Torres, Manuel Esteban de la Torre, Adrián Tomás Torres Palés y José Francisco Sánchez-Moreno Flecha.

 

estudiantes con placa del Colegio Mayor Larraona

 

A continuación, se hizo entrega de las cuatro Becas de Honor de este curso. El presidente del Acto Académico, Carlos Naya Villaverde, doctor en Arquitectura y director de la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra recibió la primera Beca, por sus muchos méritos y generosidad.

La segunda se entregó a Josu Jiménez Etxabe CMF,  antiguo alumno del Colegio Claret Askartza, misionero claretiano y antiguo Capellán del Colegio Mayor Larraona, por su gran labor y la huella que ha dejado en nuestro Colegio Mayor.

La tercera Beca de Honor fue concedida a la profesora Anna Dulska, doctora en Historia, investigadora en el Instituto Cultura y Sociedad de la Universidad de Navarra y docente, que colabora en nuestro Taller de historia de Pamplona desde 2016, por su contribución y cariño hacia nuestro Colegio Mayor.

La última Beca fue para Francisco “Chapu” Apaolaza Fernández, por “continuar siendo uno de los mejores embajadores de Larraona que pueda haber”.

 

Invitados con la beca de Honor del Colegio Mayor Larraona

 

Juan Gallego García, director del Colegio Mayor Larraona, dedicó unas palabras de agradecimiento a todos los presentes, especialmente al Colegio Mayor Jaime del Amo, de Madrid. También hizo alusión cariñosamente a nuestras colegialas, presentes por primera vez en este acto: “habéis subido el nivel de Larraona”.

Antes de pasar a la cena compartida en el comedor, a la que los asistentes estaban invitados, el profesor Carlos Naya realizó el discurso de clausura del acto, hablando con cariño de la vida en el colegio mayor: “De vuestros compañeros aprenderéis cosas insospechadas”, aseguró. Animó a los colegiales a aprovechar sus años universitarios al máximo “De lo que hagáis estos años dependen cosas grandes”.

 

estudiantes brindan en el comedor del Colegio Mayor Larraona

 

Cerramos el acto entonando el Gaudeamos Igitur:

 

Alegrémonos pues, mientras seamos jóvenes.

Tras la divertida juventud, tras la incómoda vejez, nos recibirá la tierra.

Viva la Universidad, vivan los profesores.

Vivan todos y cada uno de sus miembros, resplandezcan siempre.

Daniel Sánchez Moreno

«Mi bisabuelo era de Pamplona, pero vine sin conocer a nadie» – La experiencia de Diego Sánchez

Diego Sánchez Moreno estudia tercero de ADE con Dirección de Estrategias. Hace tres años que su familia se mudó a Madrid y él tuvo que dejar Lima para venirse a estudiar a España. Así fue como terminó en la Universidad de Navarra y lleva desde entonces con nosotros. Te invitamos a leer su experiencia.

 

 

De Lima a Pamplona

Debido a la mudanza de su familia, Diego y su hermano tuvieron que solicitar un traslado de expediente para continuar con sus estudios aquí, en España. A través de la recomendación de una conocida de la familia, dieron con la Universidad de Navarra y con nosotros. La flexibilidad de horarios y la posibilidad de crear buenas relaciones con el resto de compañeros fue lo que le hizo decidirse por venir al Colegio Mayor Larraona.

Aunque su bisabuelo era pamplonés, Diego vino aquí sin conocer a nadie. Gracias a su estancia en el Colegio Mayor, formó su primer grupo de amistades, indispensable para su integración. “Terminas asociándote con gente que no es de tu misma carrera. En Lima yo solo me reunía con gente de mi misma facultad, no iba más allá”. Nos cuenta que lo que más destaca de la experiencia como colegial son las actividades de los primeros días que le hicieron conectar con sus compañeros. “Jugando al básquet conocí a un chico que hasta ahora sigue siendo mi amigo, y es de Hong Kong, en mi vida me imaginé eso”.

Pista de baloncesto vista a través de una valla

Una adaptación satisfactoria

Diego nos confiesa que echa de menos a su familia paterna, que sigue viviendo en Perú, pero acepta que es parte del proceso. “ se extraña a la gente, pero es parte de la experiencia del estudiante”. Además, suele aprovechar los fines de semana o los festivos para volver a Madrid y ver a su familia.

No todo ha sido fácil, adaptarse a un nuevo país y una nueva forma de vida no es para cualquiera. Nos cuenta que nunca había vivido la experiencia de compartir mesa con tantas personas. “Eso sí que es un shock, me sentía un bicho raro bajando a comer con doscientas personas”. Aunque al final a todo se acaba acostumbrando uno: “Poco a poco vas conociendo a las personas, ves que todos estáis en la misma situación.”

A Diego le ha debido de picar el gusanillo con eso de viajar, porque tiene la intención de seguir aprovechando al máximo todas las oportunidades que tenga de formarse, trabajar y vivir nuevas experiencias: “No sé si terminaré en Londres, trabajando en Madrid… aún no lo sé”.

 

Grupo de colegiales haciéndose una foto en un espejo

 

El colegio mayor, un hogar

“El deporte no es lo mío, pero en las actividades más tranquilas como cartas y juegos de mesa sí que participo”. Aunque a pádel y a fútbol juega de forma ocasional, por pasar el rato con sus amigos, Diego participa en otras actividades, como el grupo de voluntarios. También ha participado ayudando en el Acto de Becas, y en actividades externas.

Nos cuenta que este tipo de actividades vienen bien para obtener puntos de colegial: “Elegir las habitaciones se gana con méritos, bien por notas o bien por puntos. Puedes ganar puntos participando en los torneos, las actividades, los voluntariados…”

Pero con las actividades se gana algo aún más valioso que los puntos. Diego nos cuenta que lo más importante de estos años son las conexiones, el grupo de gente que se lleva para toda la vida. “Sonará estúpido, pero se crea como una segunda familia, eso es lo mejor del colegio mayor.”

primeros auxilios larrona

Los colegiales Salva Roig y Alex Mena nos forman en Primeros Auxilios

La vida universitaria, en el Colegio Mayor Larraona, tiene una proyección que cotidianamente nos sorprende. Nos trae aires nuevos. Las palabras y la experiencia de Salvador Roig y Alexandre Mena –estudiantes de segundo de medicina y colegiales de Larraona– nos han removido con esa inquietud por aportar, contribuir y ayudar desde el mundo de los Primeros Auxilios. Una actitud que resulta reconfortante. Son una referencia de esa juventud que empuja fuerte, con valores y vocación de servicio, y a la que urge dar voz. Nos acercamos a ellos.

 

A Salva y Alex los reclutaron el año pasado. ¿Quién los fichó? La organización  EqÜES –Equipo de Urgencias y Emergencias Sanitarias (somoseques.org)–, presente en Pamplona y Barcelona, nutrida de profesionales y voluntarios, que se preparan internamente para impartir formaciones en colegios e institutos. Lo hacen de manera voluntaria. Se fundó en 2016, a día de hoy cuenta con más de 300 estudiantes voluntarios y ya han formado a más de 10.000 personas, no solo en primeros auxilios, sino también en prevención de la drogodependencia.

 

Los dos colegiales de Larraona, ya metidos en faena en esta actividad desde el curso pasado, pensaron que febrero podía ser un buen momento para impartir esta formación en su propio Colegio Mayor, ya que “siempre es bueno saber cómo actuar ante ciertas situaciones de peligro”. Como es tradición en Larraona, propusieron la actividad y se encargaron de llevarla a la acción.

 

Simulación de RCP

 

Alex. El año pasado tenía inquietud por hacer algo diferente y me apunté a esta charla. Como espectador me gustó mucho. Me sorprendió cómo con tan poca explicación puedes entender tanto y ayudar tanto. Así que me apunté y ahora soy parte activa de Eqües. Y de ahí, lo siguiente fue la idea de dar la charla también en Larraona.

 

Salva. En esta charla de Larraona y en todas las formaciones que impartimos, procuramos que sean charlas dinámicas. Que los propios espectadores se expresen y digan qué harían o qué no harían ante una intoxicación etílica, o ante un infarto… Se trata, en muchos casos, de desmentir ideas erróneas, y con esta dinámica de participación los conceptos se asimilan mejor.

 

Alex y Salva cuentan, en el transcurso de la conversación que existen mitos equivocados, muy curiosos, que conviene desmentir, “La pasta de dientes no sirve para desinfectar, tampoco sierve echar agua o dar golpes a una persona inconsciente, ni poner hielo a una quemadura, y desde luego dar café con sal o ibuprofeno para una resaca no resuelve nada. Estas cosas ¡no funcionan! Y deben saberlo.”

 

Salva y Alex simulan la maniobra de Heimlich

 

Dinámica de las sesiones

 

La charla que impartieron en Larraona, y las que imparten en colegios e institutos, tienen una dinámica similar, con una parte teórica, en la que se cuestiona a los asistentes para que participen, y una segunda parte práctica con maniquíes específicos para la puesta en práctica de los conceptos aprendidos.

Alex. Los muñecos para practicar hacen que las sesiones sean animadas y muy útiles. Los últimos 20 minutos los hacemos en grupos, para poder ensayar con ellos sobre todo la RCP pulmonar. Un coma etílico es una situación delicada, pero es que una RCP determina si la vida se salva o se pierde o, en caso de supervivencia, si se realiza correctamente puede evitar secuelas graves. Esta maniobra es muy mecánica y si la practicas varias veces ya lo tienes interiorizado y lo puedes hacer bien.

 

Salva. Estas prácticas las hacemos en grupos pequeños porque así tienen confianza para decir cosas que no exteriorizarían en un grupo mayor. Intentamos que todos puedan hacer una ronda y vamos priorizando conceptos para que lo esencial quede claro y lo hayan practicado.

 

Alex y Salva simulan la postura de seguridad lateral

 

Ficha técnica de la sesión impartida  en el Colegio Mayor Larraona: martes 20 de febrero, 19.30 h.

15 min – heridas, hemorragias, quemaduras

5 min – fracturas, luxaciones

10 min – alcohol, intoxicación y coma: maniobra frente mentón, posición lateral de seguridad

10 min – OVACE (Obstrucción de vía aérea por cuerpo extraño) atragantamiento: 5 golpes interescapulares, 5 maniobra de Hemlich

10 min – epilepsia, ictus e infarto

30 min – parte práctica (RCP, maniobra frente-mentón, posición lateral de seguridad, desfibrilador)

 

Un poco de historia personal

¿Y quiénes son estos colegiales que nos han aportado tanto con esta charla de Primeros Auxilios? Aquí van unos pequeños apuntes autobiográficos.

 

Alex.

Soy de Valencia. Desde muy pequeño sabía que quería ser médico, no sé por qué, mis padres no son médicos, pero me gustaba, me gustaba ayudar a la gente. Y en mi colegio escuché que ésta era una buena universidad. Nos informamos, me gustaba mucho y me preparé para la prueba de acceso. Y buscando alojamiento el que más me gustó fue Larraona. Me cogieron. Y estoy supercontento. Valoro sobre todo el hecho de que hay mucho contacto entre tú y la institución, no es como hablarle a una máquina: si quieres hablar con la subdirectora o con el director los tienes ahí, a todo el equipo directivo, nos conocemos todos, puedes hablar sobre cualquier cosa, es un clima muy abierto, hay mucha comunicación.

 

Salva

Soy de Murcia, pero vengo de Barcelona, a donde en un momento dado me fui a vivir con mis padres. Desde que tengo uso de razón quería hacer medicina, por temas personales que pasaron en casa, estuve muy cerca del ámbito médico, fue una experiencia dura, y la medicina me encantó, así que siempre perseguí ese sueño.

Conocí la facultad y la universidad por su reputación, dudaba entre Barcelona y Navarra, pero me decidí por el currículum integrado de aquí, que se centra más en tener los conocimientos y aplicarlos cuanto antes, me convencieron también las pasantías médicas de tercer curso, y las salidas y conexiones profesionales que facilita esta universidad, no solo en España sino en todo el mundo. Larraona lo escogí, me encantó, no solo por la localización, sino también por la experiencia de otros, por la cercanía del equipo directivo, y porque intentan que haya mucha piña, mucha comunidad entre todos y hace que la estancia la disfrutes mucho más.

ponentes del acto de apertura de las jornadas de los Colegios Mayores en Bilbao

Un encuentro muy enriquecedor – XLV Jornadas de Colegios Mayores

Del 15 al 17 de febrero se celebró en Bilbao la XLV edición de las Jornadas de Colegios Mayores organizadas por el Consejo de Colegios Mayores Universitarios.  Nuestro director Juan Gallego, la subdirectora Magaly Marrodán y los colegiales decanos Eduardo Díez y Alejandro Boned viajaron hasta allá para participar en este interesante encuentro que congregó a más 250 miembros de Colegios Mayores de toda España y de Italia.  Durante estos días, reflexionaron sobre el papel de los Colegios Mayores ante los Objetivos de Desarrollo Sostenibles (ODS).

director y dos estudiantes en Bilbao

 

 

La aportación en educación, trabajo e igualdad

En concreto, las jornadas estuvieron centradas en 3 de los 18 ODS: el objetivo 4, Educación de Calidad, presentado por Xabier Murelaga Bereicua y Mikel Aranburu Barandiaran;  el objetivo 8, Trabajo decente y crecimiento económico, a cargo de María Rodríguez Díez; y el objetivo 10, Reducción de las desigualdades, presentado por Estíbaliz Sáez de Cámara. Se impartieron conferencias y se organizaron mesas de trabajo en distintos espacios de la Universidad de Deusto, la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) y la Universidad de Mondragón, coorganizadoras y anfitrionas del evento.

“Primero un director de un Colegio Mayor exponía el tema y después nos reuníamos en distintos grupos para trabajar en torno a tres preguntas relacionadas con el tema”, explica Alejandro Boned. “Debatíamos entre nosotros y se redactaban las conclusiones de ese debate, para que la organización pueda estudiarlas”.

Los grupos para las sesiones de trabajo estaban compuestos por directivos y colegiales de diferentes centros. “Una de las cosas más interesantes fue la diversidad de colegios mayores. Vinieron desde uno de Valencia en el que eran una veintena de colegiales, hasta uno de Madrid en el que eran 360. Las formas de organizarse y de hacer las cosas son muy diferentes. Juntarse te permite salir un poco de la burbuja en la que vivimos cada uno, para poder ver otras visiones y otras formas de trabajar, de organizar las actividades, de fomentar la participación, etc. y pensar cómo podemos mejorar”.

 

asistentes a las jornadas de colegios mayores

 

Una experiencia cultural y social

Los momentos para la reflexión, el diálogo y el intercambio de ideas se alternaron con otros de aprendizaje cultural y socialización, como la visita al Museo Guggenheim Bilbao o la cena de gala de clausura de las jornadas.

El ambiente fue muy bueno. Entre comidas y cenas teníamos espacios para conocernos entre los colegiales. Normalmente éramos decanos o estudiantes que ya llevamos varios años dentro del mundo colegial y que podemos compartir un mismo ambiente: de camaradería, compañerismo, buen rollo…”, cuenta Alejandro. Señala que tuvieron la oportunidad de estrechar relaciones con otros colegios mayores claretianos, como el Colegio Mayor Jaime del Amo en Madrid.

Ahora el equipo directivo y los decanos van a llevar esta experiencia al Consejo Colegial, planteando ideas que han surgido a partir de este encuentro. Una de ellas es la creación de un torneo intercolegial de baloncesto y de pádel. “Queremos mantener la relación que hemos establecido con otros colegios mayores y fortalecerla a nivel institucional. Además, esto permitirá que otros colegiales de Larraona tengan la oportunidad de conocer a estudiantes de otros colegios mayores, como hemos podido hacer nosotros”, detalla Alejandro.

 

directores y estudiantes del colegio mayor en campus de Bilbao

 

Desde el Colegio Mayor Larraona mandamos un saludo a todas aquellas personas con las que hemos coincidido estos días y resaltamos nuestro agradecimiento al Consejo de Colegio Mayores de España por la organización de estas jornadas tan fructíferas. ¡Nos vemos en la siguiente edición!

estudiantes del club de cocina con ingredientes preparados

El nuevo club de cocina

A lo largo del año solemos tener varios talleres de cocina y, este curso en especial, esta dinámica está cogiendo ritmo gracias a la iniciativa de dos de nuestras colegialas, Elena Olazar y Zeni Thompson. Han creado un club de cocina para aprender a preparar principalmente postres y también aperitivos y otro tipo de comida salada. ¿Quieres unirte?

 

dos chicas estudiantes del colegio mayor larraona sonríen

 

Ambiente internacional

Elena viene de Florida, pero su padre es de Vitoria, así que ella tiene la doble nacionalidad. Ahora mismo está haciendo un GAP year en la Universidad de Navarra, y está aprovechando para estudiar español y cursar distintas clases. El año que viene quiere empezar el grado de ISSA. Tiene dos hermanas, una en Alaska y otra en Florida, con su padre. Aunque se encuentra lejos de ellas, ahora puede ver más a su familia en Vitoria.

Zeni es hondureña, pero ha vivido en Estados Unidos, Tailandia y Costa Rica. Estudia Relaciones Internacionales en la Universidad de Navarra, ya que en un futuro se plantea trabajar en Europa y quería volver a vivir en un país de habla hispana. Tiene un hermano mayor en Portugal y un hermano mellizo en Barcelona.

Ambas aseguran estar disfrutando mucho del ambiente del Colegio Mayor Larraona: “Me encanta. En Pamplona se puede caminar por todas partes. Y estar en el Colegio Mayor es como tener otra casa”, explica Elena. “El equipo directivo está formado por adultos que nos quieren. Como estamos lejos de la familia nos viene muy bien este ambiente familiar”. “Además tiene programa de voluntariado, equipo de fútbol sala… Hay tantas actividades para hacer aquí…”, añade Zeni. “Siempre estamos en las salas de estudio, es un ambiente muy bueno”.

Elena y Zeni participan en el taller de Ecología y Medio Ambiente y forman parte del equipo de fútbol. “Me encanta el fútbol, en Florida jugaba en un equipo”, dice Elena. “Yo no soy futbolista, pero me gusta el ambiente del equipo, nos animamos todas”, confiesa Zeni.

 

bagels preparados por el club de cocina

 

El club: cocina rica y divertida

“La comida aquí está rica. Es muy conveniente tener las tres comidas al día”, cuenta Elena. “Aun así, nos gusta cocinar, hornear de vez en cuando”, sigue Zeni. “Como se estaba poniendo el clima frío, pensamos que sería una buena idea hacer galletas y le preguntamos al equipo directivo si podíamos hacerlo”.

Cada mes, Elena y Zeni envían tres propuestas al grupo de WhatsApp que han creado para que los colegiales voten lo que quieren hacer en el taller. Se trata de un grupo reducido, de entre 6 y 10 personas, para que puedan cocinar con comodidad en el aula preparada para ello.

Lo primero que hicieron, en diciembre, fue galletas de canela. “Nos salieron un poco feas, pero ricas”, reconocen. Se las dieron a probar a los trabajadores del Colegio Mayor.

En enero prepararon unos deliciosos bagels salados, pensados para una comida tipo brunch. Y en febrero volverán a la repostería con una receta con temática de San Valentín. “Nos encantan los postres”, apunta Elena. Pero dicen que no descartan volver a proponer algo salado para otras sesiones, como la tortilla de patata.

“El objetivo es que la gente pueda aprender y que pasen un buen rato, que sirva para relajarse y desestresarse de los exámenes”, señala Zeni.

 

¿Quieres participar en el club? ¡Contacta con Elena o con Zeni y ven a pasar un buen momento!

estudiante finaliza estudios en colegio mayor

“He sido muy feliz aquí” – El testimonio de Borja Rodríguez

Se me hace duro. Sé que llega el momento de despedirse, pero me va a costar. No quiero pensar en el momento de subir las escaleras del Colegio Mayor por última vez”. Así expresaba Borja Rodríguez Manzano sus emociones los días previos a marcharse definitivamente del Colegio Mayor, tras finalizar el grado de ADE en la Universidad de Navarra. Desde que llegó a Pamplona en septiembre de 2019, el estudiante donostiarra ha permanecido todos los años de estudio con nosotros. Ahora siente una mezcla de pena al despedirse; de orgullo, alegría y agradecimiento por todo lo vivido; y de vértigo ante una nueva etapa que comienza. Compartimos su testimonio.

 

colegial estudia en el colegio mayor

 

Un camino de crecimiento

Borja reconoce la gran evolución que ha experimentado desde que entró aquí. A nivel académico y a nivel personal: “La carrera no ha sido fácil, he tenido un montón de altibajos, pero estoy orgulloso del trabajo y el esfuerzo que le he dedicado. Agradezco mucho todo el apoyo que me ha prestado el equipo directivo del Colegio Mayor. El cambio del colegio a la universidad es un salto importante que se me hizo cuesta arriba, y desde el primer momento aquí me han estado ayudando y orientando”.

Afirma que es una etapa que ha vivido plenamente, aunque le habría gustado disfrutarla aún más y haberse agobiado menos con los exámenes y las notas, porque “no todo es la universidad”: “Antes cuando suspendía me llevaba un disgusto enorme. Pero me di cuenta de que no merecía la pena: me lo tenía que tomar como una señal para mejorar. En mí ha habido un gran progreso en madurez y aprendizaje”.

Además del acompañamiento personal y académico, el colegial agradece la orientación que ha recibido en este último tiempo. “Después de cenar me reunía con Magaly en el despacho para pensar. Ella me hacía preguntas y yo tenía que reflexionar y ponerlo en común al día siguiente. Me ha ayudado mucho a saber hacia dónde quiero encaminarme profesionalmente, y también a preparar el currículum y la carta de presentación”.

A Borja le interesa el mundo del marketing, la publicidad y las redes sociales, y también el de la innovación. El año pasado su equipo llegó a la final del concurso Innovation Fast Track de la Universidad de Navarra con un proyecto de economía circular: la elaboración de ropa a partir de leche caducada.

Durante estos cuatro años, el estudiante ha participado en nuestro Taller de Ecología y Medioambiente y en un sinfín de actividades más, como charlas o excursiones, además de haber formado parte del Consejo Colegial desde 2º curso. Ha sido el encargado de presentar el Acto de Becas los dos últimos años, algo que siempre recordará y que le ha ayudado a desarrollar sus habilidades comunicativas. “Estaba tan nervioso que escuchaba la pisada de mis zapatos y el ruido del traje al moverme, pero lo disfruté. ¡Si queréis puedo hacerlo una vez más!”.

 

presentador del acto de becas

 

Bien acompañado

Durante estos cuatro años Borja cuenta que ha vivido mejores y peores momentos, pero en todos ha estado bien acompañado.

“El equipo de cocina, de limpieza, el equipo directivo… me han estado apoyando desde el primer momento. Han sido los mejores años gracias a las personas. El coronavirus me pilló al principio de la carrera. En marzo de 2020 tuvimos que volvernos a casa. Como pensábamos que el confinamiento era algo temporal, me dejé las cosas en la habitación de Larraona y Manu tuvo que mandarme los apuntes por correos exprés. Yo me pongo en la piel de los trabajadores: hicieron una labor tremenda”.

Cuando le preguntamos a Borja cuál es su rincón favorito del Colegio Mayor no tiene dudas: la recepción. “Me he pasado horas y horas hablando con Miriam, Eva, Noemí… ¿Ahora quién va a aguantar mis charlas?”, bromea.

Su padre y su hermano mayor también han sido colegiales de Larraona, así que hemos tenido la suerte de ver a casi toda la familia. “Angelita, del servicio de limpieza, le tuvo también a mi padre. Aunque ahora está jubilada, mantengo el contacto con ella. Le tengo un cariño muy especial”, confiesa.

“No sé si la gente valora lo suficiente la suerte que es estar aquí. Todas las actividades, la oportunidad de conocer a gente… Sigo hablando prácticamente a diario con los amigos que he hecho aquí, ahora que estamos en distintas ciudades”.

 

estudiante con escudo de Larraona

 

Segunda familia y segundo hogar

Siempre que Borja habla de Larraona se refiere al Colegio Mayor como su “segundo hogar”. “He sido muy feliz aquí, por eso me da tanta pena irme”, concluye.

¡Mucha suerte en esta nueva etapa, Borja! Estamos seguros de que la seguiremos de cerca; mantendremos el contacto. Las puertas de nuestro Colegio Mayor están siempre abiertas para todos nuestros antiguos colegiales, para que visiten el que siempre será su hogar en Pamplona.

Figuras de la sagrada familia

Celebramos la Navidad en el Colegio Mayor Larraona

El pasado 14 de diciembre organizamos nuestra tradicional velada navideña, un gran momento del año para todos nuestros colegiales. La celebración comenzó a las 20:00h, con una eucaristía en la capilla para dar gracias y prepararnos para el acontecimiento divino que celebramos en estas fechas. A las 21:00h nos juntamos en el comedor para disfrutar de una cena especial y a las 22:00h continuó la fiesta con música en directo y el reparto de diferentes premios. ¡Una vez más, lo pasamos en grande! Disfrutamos mucho compartiendo entre todos y brindando con alegría e ilusión por todo lo vivido este primer trimestre del curso.

 

estudiantes en el comedor en la cena de Navidad

 

Estreno de ‘Larraona Fusión’

La agrupación musical que han formado nuestros colegiales se estrenó ante el público con cuatro temas: Last Christmas (Wham!), You Know I’m No Good (Amy Winehouse), Just My Imagination (The Cranberries) y Bitter Sweet Symphony (The Verve). Nos demostraron su gran talento y contribuyeron a que el ambiente fuera único.

 

una estudiante toca la guitarra y canta en un grupo de música

 

I Edición del Concurso de Belenes

Este año hemos lanzado un nuevo concurso para promover la tradición cristiana de poner el belén y fomentar la participación y la creatividad de los colegiales. Los estudiantes presentaron su proyecto y los dos ganadores recibieron, como parte del premio, un importe para pagar los materiales para llevarlo a cabo. El primer premio fue para el proyecto de María Revuelta, y el segundo, para el proyecto del grupo conformado por Eneko de Diego, Martí Viñolas, Enrique Esteban, Alexandre Mena, Eneko Ezponda, Íñigo Frías, Salvador Roig y Manuel Egea. El jurado concedió un accesit a la obra de Amelia Wefer y Javier Ripoll.

 

 

Además, anunciamos los ganadores del concurso de decoración del hall de los distintos pisos, que fueron los pasillos del 5º derecha y 4º izquierda (ex aequo).

 

 

Reparto de premios de los torneos deportivos

También aprovechamos la ocasión para repartir los premios de los torneos que se han llevado a cabo hasta el momento. En pimpón, el campeón ha sido Pol González y el subcampeón, Miguel Vicioso; en ajedrez, Pablo García Santos (campeón) y Manuel Mañas (subcampeón); en mus, Iñigo Zarauz e Iñigo Morales (campeones) y Marcos Fernández y Gonzalo Ovejero (subcampeones); en el torneo de pádel femenino, Sofía Rivero y Cecilia Sierra (campeonas) y María Villaplana y Noa Marcos (subcampeonas); en pádel masculino, Ion Gracia e Ignacio Herrero (campeones) y Eduardo Lara y Marcos Fernández (subcampeones); y, finalmente, en pádel mixto, Cecilia Sierra y Martín Díaz Argüelles (campeones) y Jara del Amo y Marcos Fernández (subcampeones).

Por último, premiamos a los tres estudiantes con más puntos de colegiales acumulados por su participación en las actividades.

 

 

Han sido semanas intensas de estudio y nos alegramos de haberlas concluido con una celebración tan entrañable. ¡Nos vemos a la vuelta de las vacaciones!