Una parte esencial de la vida en el colegio es la competición deportiva. Desde 1971, la participación de nuestros colegiales en diferentes eventos deportivos, ya sea en torneos propios de nuestro centro como fuera de él, en el entorno universitario o a nivel federado, conforma una de las mejores experiencias para ellos a lo largo de su vida universitaria.
La vida deportiva en el colegio se organiza desde tres niveles: en un primer escalón, de mayor exigencia, acogemos y facilitamos la compaginación de la vida universitaria y deportiva a chicos que compiten en rangos semiprofesionales; en segundo lugar, representando a nuestro centro, compitiendo en diferentes torneos (principalmente el tradicional y reñido Trofeo Rector de la Universidad de Navarra, aunque también en otras competiciones); y, en tercer lugar, en los torneos internos del Colegio Mayor, donde cabe prácticamente cualquier afición y gusto deportivo si encuentra a suficientes adeptos.
Apoyo en la excelencia deportiva
Entre nuestros muros se han alojado muchos colegiales ligados al deporte más exigente, desde jugadores del Osasuna a la competición nacional de Judo. Actualmente se encuentran con nosotros tres jugadores de baloncesto del equipo federado oficial de la Universidad de Navarra (Telmo Baquedano, Pablo Infante y Sergio Freire), un jugador de balonmano de Anaitasuna (Javier Sánchez Destar) y un saltador de pértiga (Juan Ruiz). Una parte importante de nuestra aportación a su recorrido es facilitarles una dieta adaptada a sus necesidades.
Equipo oficial del Colegio Mayor
Nuestros colegiales representan también a Larraona en un rango también de gran competición y compromiso. El principal torneo en el que juegan es el Trofeo Rector de la Universidad de Navarra en diferentes deportes (fútbol sala, tenis de mesa, pádel, squash…). En el que este año, lamentablemente, no ha sido posible participar por incompatibilidad de fechas y por el COVID.
No te vayas de Navarra… sin txapela
Aunque su nivel de especialidad es menor que los anteriores, las diferentes modalidades de campeonatos que organizamos en el centro son una importante fuente de amistades, grandes momentos de emoción y aprendizaje durante todo el curso. Los chicos se juegan chascarrillos, mucha diversión, algo de orgullo y, lo más importante: el premio, nuestra tradicional txapela oficial de Larraona. Bueno, eso y una merendola, así como vales para cenar en alguna que otra hamburguesería de la ciudad.
En total, este curso se han organizado torneos de fútbol 5, tenis mesa, bingo, ajedrez, mus y sokatira. Las competiciones se han dividido en tres ligas: la interpasillos (donde se forman equipos por compañeros de piso), la interregional (por Comunidades Autónomas o regiones); y la Copa Primavera, creada este año para los que se quedaban cortos de fútbol.
Este curso se han llevado txapelas los siguientes colegiales: Samuel Pascual, Bosco Sáiz y Pablo Infante (los tres por ajedrez) y Bosco Sáiz (tenis mesa); en cuanto a fútbol, los compañeros del quinto piso triunfaron en los interpasillos, que se juegan a principios de curso, mientras que el equipo de los vizcaínos ganó la competición interregional, jugada después de Navidad.
La vida cultural, que no está reñida con la física, también aporta méritos en nuestras particulares “Olimpiadas”: los diferentes pasillos y regiones obtienen puntos por sus triunfos de manera grupal, pero también individualmente cuando alguno sus miembros gana nuestro certamen literario y fotográfico (celebrado en la época navideña). Este curso se llevaron galardones de fotografía Gonzalo Fernández (1º premio), Diego Martín (2º premio), Manuel Suárez (3º premio) y Álvaro Boned (mención especial); en cuanto a los literarios, Alberto Galiana (1º premio), Bosco Sáiz (2º premio) y Álvaro Boned (3º premio).
Puntos colegiales
A finales del curso, cuando los resultados que más importan a los chicos son los académicos, el único torneo que quedaba sin resolver era el de FIFA. En la comida de despedida se entregaron las txapelas que faltaban.