estudiante mirando partitura en sala de música

Mario López Ruiz, trompetista y futuro médico

El Colegio Mayor Larraona es un universo de por sí. Con los colegiales, los trabajadores, las actividades y todas las relaciones personales que se generan entre nosotros. Pero entrar en nuestra sala de música es un nuevo microcosmos. Tras las paredes insonorizadas, los estudiantes ensayan, improvisan, aprenden un nuevo instrumento o se dejan llevar por la melodía viajando lejos, en el tiempo y en el espacio. A partir de este curso, al piano y, sobre todo, con la trompeta, el universo de la sala de música ha sumado un nuevo integrante. El estudiante Mario López Ruiz.

un estudiante tocando la trompeta

Trompetista desde los 8 años

El camino que comenzó a recorrer Mario se remonta diez años atrás. “Tras hacer una prueba elemental te llamaban para escoger instrumento. Ahí fue cuando elegí la trompeta, me parecía un instrumento muy chulo”, comenta. Y lo sigue pensando. Por eso tras los cuatro años de grado elemental, hizo los seis de profesional y actualmente está cursando el primero de los cuatro de grado superior, en el Conservatorio Superior de Música de Navarra. “Voy al conservatorio todos los días, de lunes a viernes, y ensayo también durante el fin de semana”, explica.

Si te adentras en la sala de música podrás escucharle tocar bellas melodías del “Concierto para trompeta y orquesta en Mi bemol mayor” de Joseph Haydn o complicados ejercicios técnicos para trompeta. Desde hace varios años también toca el piano, fruto de la materia “Piano complementario” que se comienza a cursar en primer grado de profesional. Y todos estos cursos de música no le han impedido empezar a cursar otro grado, de seis años, el principal motivo por el que ha venido desde Miranda de Ebro (Burgos), su ciudad natal, hasta Pamplona.

partitura de música para trompeta

Primer curso de Medicina en la Universidad Pública de Navarra

El plan de Mario es compaginar los estudios de música con la carrera de Medicina. No será fácil, pero estamos seguros de que es un alumno aplicado. “De momento el comienzo de curso está yendo bastante bien”, reconoce. Mario sabe, que al igual que ocurre con un instrumento, además del talento, los estudios son cuestión de práctica y de perseverancia. Y también de pasión. Por eso se prepara para ser médico y por eso no ha dejado de lado la trompeta durante todos estos años. “Mis profesores siempre me han animado a seguir con la carrera de la música”, comenta agradecido.

Mario se esfuerza al máximo para desarrollar sus dos pasiones durante su vida universitaria en Pamplona y desde Larraona le queremos apoyar y animar para que así sea, para que pueda conseguir las metas que se ha marcado. Y, por supuesto, para que nos siga deleitando con sus obras a todos los que habitamos de vez en cuando el universo de la sala de música.